(Mateo 16:18, 28:19-20; Hechos 2:41, Efesios 5:23-26, 1 Timoteo 3:15):
Creemos que la iglesia del Señor Jesucristo es exclusivamente una congregación o asamblea de personas salvas y bautizadas correctamente (Tiempo, motivo, método y autoridad) organizada con orden, propósito y membresía real, local y visible; que guarda las enseñanzas de Cristo. Creemos que Cristo es el fundador, cabeza y legislador de la iglesia y que esta solo es ejecutiva.
Creemos que la primera de este linaje de iglesias fue establecida por nuestro Señor Jesucristo durante su ministerio personal aquí en la tierra y que le prometió existencia perpetua y continua por todas las edades.
Creemos que cada congregación es una iglesia completa en sí misma y que no es algo universal, mundial, nacional, regional o cosa semejante. Creemos que quienes deben presidirlas son sus misioneros y pastores cuyas calificaciones, derechos y deberes son descritos en las Escrituras.
Creemos que la responsabilidad primaria de la iglesia se encuentra en la Gran Comisión, esta es, hacer discípulos individuales, bautizarlos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo y enseñarles e instruirles como Él lo ha mandado para que se reproduzcan en más discípulos y más congregaciones de Cristo por todo el mundo.
Creemos que es bíblico que las verdaderas iglesias bautistas cooperen las unas con las otras contendiendo por la fe, la propagación del evangelio y el apoyo mutuo.
Creemos que los Bautistas no somos protestantes, reformados, ni la continuación del pueblo de Israel, sino, el resultado del ministerio terrenal de Cristo, y estamos seguros de la distinción entre los términos iglesia y familia de Dios.